¿Dónde poner el mostrador?

El mostrador es uno de los puntos fuertes de nuestro negocio, es uno de los nexos de unión entre el cliente y el punto de venta y debe reflejar el símbolo y características de la empresa.

Un buen asesoramiento comercial en este punto es vital para el buen funcionamiento del negocio.

Los tipos de mostradores según el trabajo que desempeñan son dos principalmente, uno es  el de asesorar al cliente, y otra es el de hacer el servicio de caja. Se pueden realizar estas funciones en el mismo punto o en diferentes según la distribución comercial de nuestro local.

A la hora de favorecer nuestras ventas este elemento deja de ser un simple mueble y pasa a convertirse en un amplificador del flujo de clientes.  En comercio, cuanto más superficie de exposición sea recorrida, más visibles serán nuestros productos y más ventas se realizarán. Bien, pero ¿Dónde lo pongo?

¿Dónde ubicar el mostrador?

La ubicación varía principalmente según dos factores, uno es según el tipo de negocio, y otro es  dependiendo de la superficie y forma del local.

Conforme al tipo de negocio:

Si nuestra empresa vende un servicio en el cual no necesitamos una exposición de productos, como puede ser una clínica, el objetivo de nuestro mostrador será el de atención al público. Dado que la focalización del cliente al entrar en el local se debe centrar en este punto, el mostrador deberá estar situado en una zona protagonista central y a ser posible ladeado hacia la izquierda para que no sea tan intimidante para algunas personas.

En comercios donde tenemos una exposición de ventas, la posición correcta del mostrador es en una zona donde aumente el flujo de clientes. Lo más habitual es situarlo al fondo e intentando que no este totalmente centrado porque sino  toda la atención del cliente irá hacia ese punto y avanzará directamente por toda la tienda sin mirar apenas los productos expuestos focalizando su atención hacia el mostrador.

En negocios en los que se generen grandes colas es bastante habitual colocarlos en la zona inmediata de la entrada a la izquierda, favoreciendo que el cliente recorra todo el establecimiento en sentido antihorario y que no haya molestias con la cola mejorando así las ventas. Esto es bastante usual en tiendas de ropa con mucho movimiento.

Según la superficie:

Si el local es pequeño es mejor situar el mostrador en zonas frías, al fondo generalmente, pero si tenemos un establecimiento con una superficie mayor de 300 m2 una opción interesante podría ser  la de ubicar el mostrador en una zona central. Con esto mejoramos el flujo de circulación de compradores y optimizamos el espacio aumentando la superficie de atención al público creando más puestos en un solo punto.

Si nuestro local es muy irregular y tenemos puntos donde el tránsito de clientes se reduce (zonas frías), con el mostrador podemos mejorar el paso de clientes hacia ellos funcionando como nexo de unión entre las diferentes zonas frías y calientes.

La ubicación de este elemento es primordial y es conveniente que un profesional estudie meditadamente todas las variables.

Si necesita asesoramiento sin compromiso para su negocio no dude en contactar.